POBRE INGENUO...

No me lleves, que no estoy preparado... muerte...

No juegues a ser Dios y me empujes a tu desidia.

Con lo fácil que lo tienes...

millones de personas pasando hambre extremo,

millones de personas enfermas de forma terminal,

millones de almas sin rumbo ni perspectiva en la vida.

Yo sí..., vivo muy tranquilo, no te equivoques...

tengo lo necesario para ser feliz, muy feliz..., no te equivoques...

No sabemos cuál será nuestra fecha de caducidad,

el destino puede estar ya escrito

o lo vamos hilvanando minuto a minuto

con el hilo blanco de la cordura,

pero no lo eches a suertes..., no me lleves... muerte...

Carpe Diem... nunca te quedes con las ganas, le dijo esta...

... y al cabo de un tiempo, la muerte se le llevó...